sábado, 24 de octubre de 2009

El poema de la semana



  El poema de esta semana fue escrito por el poeta español Miguel Hernández. Lo dedicó a su hijo tras recibir una carta de su mujer en la que le decía que no comía más que pan y cebolla.
Recordad que podéis dejar comentarios sobre lo que os parece el poema en el buzón que está en la entrada de la biblioteca y en esta misma entrada del blog.


NANAS DE LA CEBOLLA

La cebolla es escarcha 
cerrada y pobre. 
Escarcha de tus días 
y de mis noches. 
Hambre y cebolla, 
hielo negro y escarcha 
grande y redonda.


En la cuna del hambre 
mi niño estaba. 
Con sangre de cebolla 
se amamantaba. 
Pero tu sangre, 
escarchada de azúcar 
cebolla y hambre.


Una mujer morena 
resuelta en lunas 
se derrama hilo a hilo 
sobre la cuna. 
Ríete niño 
que te traigo la luna 
cuando es preciso.


Tu risa me hace libre, 
me pone alas. 
Soledades me quita, 
cárcel me arranca. 
Boca que vuela, 
corazón que en tus labios 
relampaguea.


Es tu risa la espada 
más victoriosa, 
vencedor de las flores 
y las alondras. 
Rival del sol. 
Porvenir de mis huesos 
y de mi amor.


Desperté de ser niño: 
nunca despiertes. 
Triste llevo la boca: 
ríete siempre. 
Siempre en la cuna 
defendiendo la risa 
pluma por pluma.


Al octavo mes ríes 
con cinco azahares. 
Con cinco diminutas 
ferocidades. 
Con cinco dientes 
como cinco jazmines 
adolescentes.


Frontera de los besos 
serán mañana, 
cuando en la dentadura 
sientas un arma. 
Sientas un fuego 
correr dientes abajo 
buscando el centro.


Vuela niño en la doble 
luna del pecho: 
él, triste de cebolla, 
tú satisfecho. 
No te derrumbes. 
No sepas lo que pasa 
ni lo que ocurre. 

Miguel Hernández, poeta español (1910-1942)

2 comentarios:

  1. gracias por la elección de este poema; te recomiendo que lo escuches cantado por Alberto Cortez y Serrat.

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